Pablo Iglesias, líder de Unidas Podemos, ha sido entrevistado en Al Rojo Vivo en un momento decisivo del bloqueo político que vive España desde las elecciones del 28 de abril.

En la entrevista ha pedido al PSOE que se replanté la última propuesta que ha hecho para llegar a un acuerdo e investir presidente del Gobierno a Pedro Sánchez. Esta oferta consiste en un gobierno de coalición que sería revisable tras aprobar los Presupuestos Generales.

Ante la negativa de los socialistas, que defienden que esta propuesta anticipa una "crisis", Iglesias pide a Sánchez que la someta a la votación de las bases, destacando que le "consta que hay sectores del PSOE que estarían dispuestos a aceptar la propuesta".

Si finalmente el PSOE no acepta la oferta, su partido se abstendrá en una sesión de investidura. "Nos abstendremos, igual que hicimos en las sesiones de investidura para tender la mano a Sánchez", ha explicado.

Pero para evitar llegar a esta situación, Iglesias también ha expresado en la entrevista su deseo a que el rey "arbitre" durante la ronda de contactos que mantendrá con los diferentes partidos el próximo lunes y martes. "Sería bueno que la institución monárquica, de la que no soy partidario, asuma una de las tareas que se le atribuyen constitucionalmente: la de arbitraje y mediación", ha defendido.

"El rey debería hacer entender a todos los candidatos, en especial a Sánchez, que la coalición es una vía de dar estabilidad", añadía.

Por último, al plantearse el escenario de unas nuevas elecciones en noviembre, Iglesias ha defendido que será él el candidato de Unidas Podemos. Eso sí, si obtienen peores resultados, Iglesias ha anunciado que pondrá su cargo a disposición de los órganos de Unidas Podemos y "a disposición de los inscritos".