Los trabajos prosiguen sin novedad, centradas en la construcción de una plataforma que permita perforar dos túneles (uno paralelo al orificio y otro oblicuo) para tratar de llegar a unos 80 metros de profundidad, donde se cree que se encuentra el pequeño, de quien se ha hallado un pelo entre el material sólido que se ha ido extrayendo estos días.

El experto en Espeleología José Antonio Berrocal explica que "el terreno es de roca dura compacta, muy fuerte" y que se "ha venido abajo una gran cantidad de tierra".

Por ello, el rescate de Julen del pozo se dilatará aún más: "Se podría tardar dos o tres días en tener contacto con él". Aunque Berrocal señala que "para ganar tiempo lo ingenieros han decidido hacer dos perforaciones verticales"