Los resultados de la primera fase de los estudios de seroprevalencia apuntan a que solo el 5% de la población española ha pasado el coronavirus. En Nueva York, en cambio, estudios similares arrojan un resultado más elevado, aunque el doctor Adolfo García-Sastre advierte de que, allí, los test utilizados tienen "muchos más falsos positivos".

En cualquier caso, para el especialista, director Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes del neoyorquino Hospital Monte Sinaí, de la comparación entre el número de muertes se deduce que "tiene que haber habido más casos en Nueva York de infectados que en España".

Los especialistas ya anticipaban que "no iba a haber un 50%" de población inmunizada, que "es lo que se necesita para empezar a adquirir inmunidad de rebaño", ha apuntado García-Sastre, que descarta que el bajo porcentaje de inmunizados signifique que el virus no se contagia rápido.

"Lo que viene a decir, y la diferencia entre el número de contagiados en Nueva York y España, es que las medidas de contención en España han funcionado y han disminuido el número de contagios", ha precisado. "Aquí a lo mejor se han tomado un poco más tarde o no han sido tan drásticas como en España", ha explicado, atribuyendo a este motivo el mayor número de contagios y víctimas mortales en Nueva York.

Cómo acelerar la vacuna

Por otra parte, el especialista se ha referido al desarrollo de una vacuna y ha explicado que "el proceso de aceleración se puede realizar" aunque tampoco será para obtener una en pocos meses. "Si empezamos a usar una vacuna dentro de seis meses, no puede haber sido probada del todo", ha alertado, explicando que se decidirá si se asume este riesgo en función de la evolución de la pandemia.

Asimismo, ha apuntado a otra forma de acelerar la producción de una vacuna: producir grandes cantidades antes de comprobar si realmente funciona. De esta manera, se corre el riesgo de tener que desecharlas, pero, si funciona, "tienes ya la vacuna disponible para todo el mundo".

"Tampoco cuesta tanto, en cuestión de lo que está causando económicamente este virus, el hacer una vacuna antes de saber si está funcionando, con la esperanza de que vaya a funcionar", ha apuntado el doctor.