Pese a la tendencia a la baja en el número de nuevos contagios de coronavirus, aún es pronto para decir que la crisis está controlada. "Ciertamente hemos visto un aplanamiento atribuible a las medidas de contención, pero seguimos navegando escenarios de incertidumbre. Habrá que ver en los próximos días y semanas cómo evoluciona la curva", ha indicado David Noguera, presidente de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Al Rojo Vivo.
España es uno de los países del mundo con más víctimas mortales del COVID-19, "un dato muy duro que genera un nivel de sufrimiento altísimo", ha apuntado Noguera, que advierte de que "no necesariamente se están registrando todas las mortalidades".
"Sí que se ha visto un aplanamiento, un descenso significativo en instituciones hospitalarias, pero me temo que la foto completa es aún más dura", ha afirmado.
Las residencias, golpeadas por el virus
El doctor Noguera asegura que la actual crisis sanitaria es una situación "sin precedentes". "Estamos respondiendo a 70 epidemias a la vez, nunca antes habíamos tenido todas nuestras misiones a la vez en modo emergencia", ha asegurado.
Asimismo, se ha referido a las residencias de mayores, uno de los espacios más golpeados por la pandemia. "Nos preocupa muchísimo", ha afirmado Noguera, que defiende que las residencias "desde el principio se tenían que integrar en la respuesta general de la epidemia".
"Las personas que viven en residencias son un colectivo vulnerable y estas instituciones no estaban preparadas, ni mucho menos, para responder a esta situación", ha aseverado el presidente de MSF, que defiende que "se tienen que integrar sí o sí en el sistema de salud".
Las líneas de gestión diferencias entre servicios de salud y sociales, crean "interferencias que no ayudan", ha alertado Noguera, que también defiende la necesidad de "habilitar sistemas de referencia a los hospitales" y "hacer formación y proteger al personal" de las residencias, así como como "habilitar mecanismos de acompañamiento" para aquellos residentes con mal pronóstico, para que "pueda haber un cierto nivel de acompañamiento en el proceso de despedida, porque eso también va a dejar secuelas".