El plazo para desalojar voluntariamente el centro social autogestionado 'La Ingobernable' concluye el 28 de agosto. Sin embargo, su portavoz, Álvaro Briales, niega que vayan a abandonar el edificio. "No nos vamos a ir porque nuestra actividad es legítima", ha defendido.

"La ciudadanía, las miles de personas que recuperamos este edificio, tenemos la legitimidad para continuar desarrollando nuestra actividad", ha asegurado Briales, que ha recordado que en este centro se llevan a cabo "200 actividades todos los meses" y que por él han pasado "unas 140.000 personas" en sus dos años y medio de actividad.

"El PP regaló este edificio a una fundación amiga", ha reprochado, "si no es gracias a las miles de personas que recuperamos este edificio, hoy no existiría, estaría demolido o sería objeto de un fin privado".

Asimismo, el portavoz de 'La Ingobernable' ha abogado por una solución dialogada para un conflicto que, consideran desde el centro, "lo provocó el PP regalando un edificio municipal a un ente privado".

"Nos han amenazado de desalojo violento", ha afirmado, "creemos que las cosas no se resuelven con la Policía". "Estamos dispuestos a hablar con el Ayuntamiento de Madrid", ha asegurado.