Ada Colau reconoce que la suspensión del Mobile World Congress, que iba a acoger Barcelona, duele. "Claro que nos ha dolido", ha dicho en Al Rojo Vivo, donde ha indicado que "hasta ayer mismo" las Administraciones daban "un mensaje de tranquilidad y confianza porque aquí no había ningún motivo local para que no se hiciera este congreso".

"Estaba todo preparado para que fuera la mejor edición de todas", ha lamentado la alcaldesa de la Ciudad Condal, después de que el temor ante el coronavirus haya frustrado el evento. En este sentido, ha admitido que "sabe mal" que los organizadores decidieran cancelarlo por una "alarma global" que, según ha destacado, "no tiene impacto local ahora mismo en Barcelona, en Cataluña ni en España".

No obstante, la regidora ha afirmado que "hay que respetar" la decisión de la organización del Mobile. "La entendemos por esta situación de excepcionalidad", ha dicho, aunque ha lanzado "un mensaje de prudencia".

"No había motivos locales para esta suspensión", ha reiterado Colau, que ha indicado que pese a ello esta "tiene un impacto económico local muy importante" con "miles de trabajadores que se ven afectados". En este sentido, ha adelantado que el Ayuntamiento hará un seguimiento de esta afectación en los próximos días.

Pese a los problemas que supone la cancelación del Mobile, Colau ha reivindicado que Barcelona "tiene un ecosistema económico diverso" y no depende "de un único congreso". En cualquier caso, ha concluido, este seguirá celebrándose en Barcelona, como mínimo hasta 2023, tal y como recoge el contrato con la empresa organizadora. "Trabajamos ya para que 2021 sea la mejor edición de todas", ha anticipado.