Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, niega haber sufrido presiones de la ministra de Trabajo Yolanda Díaz con respecto a su decisión de adelantar la subida del salario mínimo antes de finales de año.

Así lo ha indicado la dirigente este miércoles en una entrevista en Al Rojo Vivo, en la que ha recalcado que "el Gobierno está absolutamente unido con respecto al SMI".

"Llevamos tres años con el alza más importante de nuestro entorno, y hemos recuperado una buena parte de lo que se había perdido. Nuestro Gobierno es progresista y está comprometido con las condiciones de trabajo, ya que la precariedad es uno de los lastres que arrastramos desde la pasada crisis financiera", ha incidido la ministra.

En este sentido, con respecto al cambio de criterio con respecto a las últimas semanas —Calviño delizó hace escasos 15 días que "no era el momento" de pensar en esta aumento sin tener la economía en datos prepandemia—, incide en que la situación sí ha mejorado sus previsiones y, concretamente, se ha mantenido al alza en julio, tanto en altas a la Seguridad Social como en reducción de los ERTE.

Sin embargo, vuelve a incidir en que hay que esperar a la evolución de la situación: "Cuento con seguir en esa senda que se vio truncada por la llegada de la pandemia. Hemos estado en estas ultimas semanas muy pendientes, y la principal incertidumbre es el impacto de la pandemia. Por eso, siempre digo vamos a ver cómo evoluciona la campaña de verano", concluye.

¿Subirá el Gobierno el SMI si en septiembre los datos empeoran?

Durante la entrevista, Calviño ha reiterado que su discurso hasta ahora ha sido "coherente" y que la subida del SMI sigue estando supeditada a la evolución de la economía. Sin embargo, al ser preguntada sobre la temporalidad que caracteriza al mes de septiembre —momento en el que se pierden muchos puestos de trabajo en el sector turístico y que además coincide con la recuperación del debate sobre el salario—, la mandataria se muestra optimista.

"El mercado español tiene mucha estacionalidad y depende del sector. Pero septiembre es cuando se reanuda el curso escolar, y suele haber recontrataciones. El objetivo es seguir en esta senda positiva y que en el otoño tengamos el nivel de empleo anterior al COVID", subraya.

Aun así, a su vez destaca que será necesario hacer "un análisis" en el que no se tenga en cuenta dicha estacionalidad, de tal forma que se aplique la medida final sin incurrir en un problema económico con los empresarios. "Seguimos tomando las decisiones adecuadas en el momento adecuado", sentencia.