Borja Sémperregresa a la primera línea de la políticapara ser portavoz de campaña del PP para las elecciones municipales y autonómicas de este año. En Al Rojo Vivo, Sémper ha confirmado que pertenecerá al comité de dirección, "donde se fija semanalmente la posición sobre los grandes temas de la política española".

Aunque se fue porque se sentía como "un bicho raro" en el contexto en el que él hacía política, afronta ahora el reto, dice, de "calmar la dialéctica política" en un contexto en el que "se ha hurtado la posibilidad de debatir con rigor sobre contenidos" y en la que importa mucho más "quién lo dice que el qué dice". "Es un reto extraordinario, uno de los cimientos para que España vaya mejor", ha explicado. Y por ese proyecto ha decidido dar el paso de volver a la política, porque está "verdaderamente preocupado por algunas cosas que ve".

Asegura así que en el PP que ahora lidera Alberto Núñez Feijóo hay un proyecto para "cambiar la política española" y "darle otro aire" a la dialéctica. Afirma que el PP "es un partido que aspira a ocupar la centralidad de la política española", con un presidente como Feijóo que era ya cuando hacía política en Galicia una "referencia de moderación y estabilidad".

"Estos tiempos necesitan políticos y estadistas, gente que piense no solo en el presente, también a medio y largo plazo en una España diferente mejor y más edificante", ha explicado, añadiendo que Feijóo quiere encarnar esta transformación política.

Y siguiendo su respaldo a Feijóo, Sémper se ha pronunciado sobre las últimas polémicas declaraciones del líder 'popular' que acusa a Pedro Sánchez de tener "un plan premeditado para alterar las bases de la convivencia democrática que se plasma en la Constitución". "El problema es que si tú etiquetas a alguien de la oposición como un peligroso fascista o como un facha estás anulando la posibilidad de que haya puntos de encuentro, que desde la diferencia se encuentres el encuentro", ha opinado.