El Ayuntamiento de Barcelona está en contra de la ampliación del aeropuerto de El Prat anunciada por el Gobierno y la Generalitat.

Así lo ha hecho saber el concejal de de emergencia climática del consistorio, Eloy Badía, que además se muestra muy duro con la propuesta, que invertirá 1.700 millones de euros, al considerar que perjudicará los esfuerzos de la ciudad condal para reducir la contaminación.

"Nos oponemos porque se realizará en un ecosistema único y porque tiene un impacto muy grande para las emisiones de gases. Esta Ampliación supondría que todo el esfuerzo de Barcelona en los próximos diez años quedaría en nada", ha espetado.

En esta línea, Badía asegura no valorar el aumento del turismo que implicaría la ampliación de los vuelos, debido a que "se incrementará el turismo low cost". "El aeropuerto acabará eliminando el turismo low cost. Se irá mitigando el turismo de fin de semana, que es un modelo de desplazamiento que, a nivel de emisiones, no es solvente".

De este modo, concluye que "el proyecto más potente es la descarbonización", y sentencia: "Las políticas de la ampliación del aeropuerto pertenecen al siglo pasado".