Los test rápidos de anticuerpos ya están llegando a las farmacias y prometen revolucionar el diagnóstico de la enfermedad.

De momento solo se pueden conseguir con receta médica y cada establecimiento dispondrá de dos unidades por día, a un precio de 25 euros cada una.

Es el caso de la farmacia de Martín Elorriaga, de Paterna, en Valencia, que ha explicado en Al Rojo Vivo cómo funcionan estos test. Con un pinchazo y en casa. Pero advierte, sí da positivo en anticuerpos, deberá comunicarlos en su centro de salud y someterse a una PCR para confirmarlo.

La Farmacia Ugarte Arana, un local céntrico de Bilbao, se muestra más reacia: "No vamos a pedirlos. Nos ha contactado un representante diciendo que ya los tenía. Lo lógico es que el Colegio Farmacéutico nos dé una explicación, no solo que un representante nos diga que ya los tiene y ya", explican en conversación con laSexta.

Estos test tienen una eficacia del 90% y son los propios usuarios quienes se lo realizan. El kit consiste en una lanceta para extraerse la sangre, como en un test de glucosa, y posteriormente ponerlo sobre la placa con los reactivos que nos dirán si hemos pasado o no la enfermedad. Esto detectará si contamos con la Inmunoglobina M (IgM), la que indica anticuerpos de una infección reciente, o Inmunoglobina G (IgG), la que apunta a haberse infectado de COVID-19 hace más tiempo.

Según apunta a laSexta Francisco Javier Encinas, de la Farmacia de Curtidores en Madrid, desde este lunes los proveedores tienen la autorización para comercializar estas pruebas, pero aún no disponen de ellas.

"Los tenemos ya pedidos y llegarán el miércoles. Están restringidos a dos por establecimiento y por día, van a estar llegando a cuentagotas. Hay 500.000 test para repartir por 22.000 farmacias", explica Encinas.

Más rápidos y baratos

Ambas boticas, primera línea de la atención sanitaria y de la consulta de los usuarios, confirman el interés que la ciudadanía tiene por estos test, aunque no es algo nuevo. "Hay demanda, llevan meses preguntando. Estos test arrojan un resultado en 15 minutos y tienen un coste de alrededor de 15 euros, frente a las pruebas PCR que pueden hacerse por lo privado y son mucho más caras", señala Encinas como una de las razones.

"Hay comunidades en las que no se puede entrar sin haberse hecho un test. Sería muy útil tener una prueba validada y accesible", dice el farmacéutico.

Illa: "No son un pasaporte absoluto"

Pese a la utilidad de estas pruebas, el ministro de Sanidad ha pedido prudencia: "Los test no son un pasaporte de seguridad absoluta, son una foto de un momento determinado.No nos exime de tomar las medidas de seguridad", ha señalado Salvador Illa este lunes, durante la rueda de prensa de presentación de la campaña de Salud Pública para Navidad.

Los test, además, requieren de una confirmación por parte de las autoridades sanitarias y del centro de salud. Si bien solo se expiden con receta médica, el resultado ha de ser notificado a los médicos. Lo ha explicado en 'Al Rojo Vivo' la directora de Indagando TV, Graziella Almendral: "A día de hoy no se ha regulado que lo notifiquen las farmacias, sino que lo tienen que hacer los propios usuarios. Tenemos que dar el resultado al centro de salud para que haya un control de la pandemia, es una enfermedad de notificación urgente".

Los expertos en salud pública critican la estrategia

Los expertos en Salud Pública también advierten: estos test por sí mismos no son una panacea, sino que hace falta una estrategia coordinada por parte del Gobierno y las Comunidades Autónomas, con suficiente información a la ciudadanía para que funcione.

Para José Martínez Olmos, ex secretario general de Sanidad y profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), "estos test de anticuerpos si son positivos indican que tenemos anticuerpos frente al virus, pero no nos dicen si son recientes y tendríamos que confirmar con PCR si es una infección reciente y activa para evitar contagios", ha dicho el experto en 'ARV'.

Además, ha advertido sobre la posibilidad de que estos test arrojen resultados no concluyentes: "En los casos en que salgan falsos negativos, podemos no hacer la previsión suficiente para no contagiar a los demás".

Más crítico con esta estrategia ha sido el Doctor en Salud Pública por la Universidad de Harvard, Elvis García: "Hacer test es positivo en general, pero si es una estrategia coordinada por el Gobierno, no solamente dejar test ahí para quien los quiera comprar. Solo ayuda a generar disparidades entre quienes pueden comprarlos y quienes no".

No solo eso, sino que los test de anticuerpos podrían no ser tan efectivos para controlar la pandemia: "En sí al test de anticuerpos no le veo demasiado valor, para lo que necesitamos hoy en día. Te da la seroprevalencia, pero no te dice si estás infectado. No le veo la utilidad ni lanzaría las campanas al vuelo".