"Contentas, felices y muy emocionadas". Así se expresa Lourdes Farratell, la nieta de una víctima de Queipo de Llano, durante una entrevista en Al Rojo Vivo tras la exhumación del general golpista, responsable de la muerte de 45.000 personas.

"Fuimos la primera plataforma en solicitar que se cumpliera la ley, pero a las víctimas nos han mantenido fuera", ha reprochado, insistiendo en que le hubiera "encantado estar ahí".

"Soy heredera de esa desgracia", ha expresado antes de hablar de su abuelo, fallecido por orden de Queipo. "Mi abuelo tenía un periódico de corte crítico que defendía a la clase trabajadora. Un día vinieron a buscarlo, desapareció, le aplicaron el bando de guerra... Y nunca volvimos a saber de él", ha relatado.