Los pasajeros de un vuelo de la aerolínea S7 que viajaban desde Bangkok, Tailandia, a Novosibirsk, Rusia, han tenido que inmovilizar a un individuo borracho, Kichi Rowdy, que se había puesto agresivo, según ha relatado uno de los presentes en su cuenta de Instagram.

Este usuario, @macpava, ha narrado como al principio "el vuelo comenzó sin problemas hasta que pasadas unas horas un pasajero comenzó a ponerse grosero": "Le llamé la atención, llevaba una botella de Whisky medio vacía, la tripulación intentó calmarle, pero todo fue en vano".

A la cuarta hora de vuelo el comandante del avión salió de la cabina y le dio a elegir entre tres opciones de acuerdo con la legislación de la aviación internacional: que él se tranquilizase solo, que al llegar le entregasen a la policía rusa o aterrizar en China o Mongolia y aclarar la situación.

No obstante, la decisión final no fue ninguna de esas: los pasajeros ayudaron a atarle los manos y los pies con cinturones y cinta adhesiva. Tras el suceso algunos de ellos sufrieron magulladuras.

El maniatado había pasado dos años en una cárcel de Tailandia y estaba siendo extraditado.