Un grupo de 40 guardacostas de Estados Unidos decidieron darse un baño al terminar su jornada. No estaban muy lejos la costa, pero eso no les impidió llevarse un buen susto.

La tripulación del Cutter Kimball saltó al agua para refrescarse sin pensánserlo cargados con aletas e incluso con un enorme flotador de unicornio. Pero cuando se encontraban pegándose un perfecto chapuzón en aguas del Pacífico, desde la radio del barco les alertaron de la presencia de un tiburón.

El animal medía 2,5 metros y estaba muy próximo a ellos. Los bañistas nadaron a toda prisa tratando de subirse a un bote o al barco para ponerse a salvo.

Pero no había tiempo, y desde la cubierta del barco decidieron disparar al agua para disuadir al tiburón. Tal y como muestra el vídeo que han compartido los Guarda Costas en las redes sociales, los primeros disparos funcionaron y el tiburón se alejó, pero volvió a dirigirse hacia los miembros de la tripulación.

De nuevo, el agente volvió a disparar varias ráfagas para mantener al animal lejos de sus compañeros.

Finalmente, todos los guardacostas salieron sanas y salvas del agua y el tiburón se alejó del lugar ileso, tal y como ha informado la tripulación.