Un hombre de 22 años ha sido intervenido en Arabia Saudí para extraer de su uretra unas pinzas de depilar de ocho centímetros que tenía introducidas desde hacía cuatro años, según recoge el diario'Metro'.

Las pinzas estaban abiertas y había riesgo de que dañasen la uretra, aunque el paciente no presentaba síntomas de infección. Por ello, según recoge la revista médica especializada 'Urology Case Reports', que publicó en mayo el caso, los médicos tuvieron que presionar el pene durante la operación para mantener las pinzas cerradas y poder así extraerlas satisfactoriamente.

Los médicos tuvieron que presionar las pinzas desde el exterior del pene para poder sacarlas.

El hombre aseguró que no había sufrido ningún dolor ni problemas a la hora de orinar durante los cuatro años que las pinzas permanecieron en su interior. Los médicos creen que se las introdujo para obtener placer sexual y recomendaron al paciente acudir al psicólogo, aunque este se negó.