TikTok es una red social conocida por sus famosos 'challenge', algunos más divertidos que otros, buscando convertir a sus protagonistas en virales. Pero estos retos a veces consisten en desafíos que son muy lesivos para las personas que los practican. Es el caso del conocido como 'blackout challenge', que ya se ha cobrado dos víctimas.

Este desafío consiste en aguantar la respiración hasta perder la consciencia. La última víctima que se ha cobrado es Archie Battersbee, un niño británico de 12 años. El menor permanecía en muerte cerebral desde el pasado abril, cuando su familia lo encontró desmayado por presuntamente realizar el citado desafío.

La familia del niño, junto con una organización cristiana, ha peleado contra la decisión del hospital de cortarle el soporte vital que lo mantiene con vida, después de que una resonancia evidenciase su muerte cerebral. Sus padres llegaron a apelar al Comité de la ONU sobre Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) para mantener los mecanismos de respiración y alimentación asistida, que les dio la razón. Sin embargo, la Corte de Apelaciones de Reino Unido ha rechazado mantener el apoyo vital y argumenta que la carta de derechos en la que se sustenta ese comité "no es parte de la ley del Reino Unido" y considera que no sería "apropiado" incorporarla a las decisiones judiciales británicas.

El 15 de julio, la Justicia ya concluyó que continuar ofreciendo apoyo vital al niño es "contrario a sus mejores intereses". La madre del menor, Hollie Dance, lo encontró inconsciente el pasado 7 de abril con una cuerda atada alrededor de su cabeza y cree que pudo haber sufrido un accidente cuando participaba en un reto viral a través de redes sociales.

Algo similar ocurrió el año pasado en 2021: una joven italiana de 10 años murió por asfixia tras colocarse el cinturón de su albornoz alrededor de su cuello, mientras participaba en un reto de la red social TikTok. Antonella Sicomero, nacida en la ciudad de Palermo (Sicilia), fue hallada por su hermana de cinco años en el baño de su domicilio, con el cinturón atado al cuello y a un radiador. Sicomero sufrió un desmayo y más tarde un coma que resultó irreversible.