Esta joven pareja ha impulsado el Proyecto Palmira, un "sueño" que nació a raíz del máster que Beatriz ha cursado con la Fundación Iberoamericana de las Industrias Culturales y Creativas. En declaraciones, la burgalesa ha recordado que este tipo de estancias son habituales entre los artistas, que las utilizan a modo de intercambio de experiencias o para ampliar conocimientos.

Beatriz se planteó como trabajo fin de máster un proyecto que ofreciese esa oportunidad a los artistas que como refugiados esperan en Grecia. La cultura como refugio, la creación artística como instrumento de integración es el inspirador concepto que subyace en el Proyecto Palmira, un clavo ardiendo al que agarrarse en uno de los episodios más "tristes" de la historia de la humanidad.

Beatriz y Daniel ponen rumbo a Atenas, donde estarán hasta el 21 de diciembre ofreciendo la estancia artística a pintores, fotógrafos, músicos, actores, bailarines o escultores refugiados. Cualquier disciplina artística es bienvenida y, los que acepten las condiciones, viajarán a España, donde se alojarán en el Centro Cultural La Harinera, localizado en Pedro Muñoz (Ciudad Real).

La burgalesa ha recordado que, a modo de prueba, van a estar en Grecia un mes y medio, periodo que tienen cubierto económicamente gracias a sus ahorros, aunque la intención es volver en 2017 si tienen éxito. Unos ahorros duramente conseguidos durante los cuatro años que la pareja ha estado viviendo en Bristol. Beatriz ha reconocido que decidieron emprender el Proyecto Palmira en un momento crítico, cuando debían decidir si continuar en Reino Unido o volverse a España.