Se reabre la investigación sobre el peor accidente de metro de nuestro país donde murieron 43 personas y 47 resultaron heridas. Casi diez años después de la tragedia, el nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana quiere saber qué fue lo que realmente ocurrió: “Es necesario abrir un nuevo tiempo para la dignidad y reparar el daño a muchas personas”.

Apenas unos días después de la tragedia, una comisión de nueve sesiones daba carpetazo a lo sucedido y dictaminaba que el accidente se debió a un exceso de velocidad por culpa del maquinista.

Un cierre en falso que las víctimas siempre se han negado a aceptar. El programa Salvados de Jordi Évole reveló que Ferrocarrils de la Generalitat preparó las declaraciones de aquella comisión.

El ejecutivo valenciano nunca ha querido responder a estas acusaciones. Ahora, desde la nueva comisión hablan abiertamente: “Era la comisión de no investigación”.

Algunas voces dicen que esa comisión estaba cocinada de antemano, algo que siguen negando los cargos regionales de entonces: “Ahora quieren decir que algunas pruebas estaban falseadas, eso es un delito”.

Para las víctimas esta comisión es el comienzo para que su duelo acabe casi una década después.