Este 16 de abril es el Día Mundial de la Voz, un bien preciado. "Es un elemento tan íntimo, tan influido por montones de matices...", ha expresado Teresa Verro, del colegio de logopedas de Madrid. De hecho, es también como el iris o la huella dactilar y se utiliza en tecnología biométrica para reconocimientos.
Los cantantes, locutores o actores la tienen, además, como instrumento de trabajo. Sin embargo, en muchas ocasiones la descuidamos. Se estima que el 33% de la población perderá la voz en algún momento de su vida. La ronquera o la afonía se soluciona en unos días, pero hay formas de evitar que vaya a más, como dejar de fumar y evitar gritar funciona.
"La percepción que tiene la gente sobre la voz es que la tengo ahí y como no duele lo dejan. Acuden cuando ya están SOS", ha aseverado la experta. Como Julie Andrews, que perdió la voz tras una operación en sus cuerdas vocales.
Pero con la voz no solo locutamos, también podemos prevenir el fraude en caso de que nos suplanten con una voz artificial. La biometría permite codificarla como si fuera una huella dactilar con solo pronunciar unas palabras.
"Se queda grabada la frase, que se convierte en un descriptor matemático que define tu voz y en cuanto empiezas a hablar lo compara, si están suficientemente próximos matemáticamente reconoce que eres tú", ha explicado Eduardo Azanza, CEO de la compañía biométrica veridas.
Otro gasto más
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