Los habitantes de la isla de Sommar, al norte de Noruega, han decidido poner fin al tiempo para evitar el estrés y guiarse por las horas de luz y las de oscuridad, según recoge 'NRK'.

Con esta iniciativa la ciudad quiere ser la primera zona del mundo en la que los relojes dejen de tener una función.

Tras varios meses viviendo en la noche, quieren disfrutar y aprovechar del sol que tienen antes de que regrese la oscuridad en agosto, sin pararse a mirar las horas.

"Hay luz del día constantemente y actuamos en consecuencia. En medio de la noche, lo que la gente de la ciudad podría llamar 2 AM, puedes ver a niños jugando al fútbol. Nuestro objetivo es proporcionar la máxima flexibilidad, 24 horas al día y siete días a la semana. Si quieres cortar el césped a las cuatro de la madrugada, hazlo", ha explicado Kjell Ove, habitante de Sommar e impulsor de la idea.

Los isleños organizaron recientemente una reunión para firmar una petición en favor de una zona libre de tiempo y el pasado 13 de junio Hveding se reunió con un miembro del parlamento noruego para entregar las firmas y discutir los desafíos prácticos y legales de esta iniciativa.

"Para muchos de nosotros, tener este acuerdo por escrito no supone más que formalizar una cosa que hemos practicado generación tras generación", añade.

De llevarse a cabo, todos los habitantes y visitantes de Sommar, en señal de triunfo, colgarían sus relojes del puente que separa la isla del resto del municipio al que pertenece, Tromsø.