Antonio Costa (PP), vicepresidente de Baleares, ha destituido a Juan Antonio Serra Ferrer como gerente de la empresa pública de Telecomunicaciones e Innovación de las islas, una decisión que llega después de la apertura de la vista oral contra Serra Ferrer por una presunta agresión sexual.

La decisión llega después de un polémico nombramiento, y es que Costa ya sabía que su amigo había sido acusado de este delito, lo que no le impidió nombrarle alto cargo del Govern. Este lunes anunció su cese y aseguraba haberse "equivocado" con su decisión.

Serra Ferrer fue nombrado alto cargo mientras estaba siendo investigado por asaltar a una desconocida en un bar, agarrarle presuntamente la cabeza y lamerle la cara. A pesar de saberlo, Costa no ha rectificado hasta que la noticia se ha hecho pública.

Un juzgado ha ordenado la apertura de juicio oral contra él y fue en ese momento cuando le comunicó su cese. Sin embargo, para la oposición esta decisión es insuficiente, ya que no es el primer escándalo que salpica a Serra Ferrer, que está acusado de pegar a un Policía Nacional.

En 2022, una universidad se negó a contratarle hasta que se resolviera la acusación. Este martes, en el Parlament, han vuelto a pedir la dimisión de Costa, algo en lo que el 'popular' difiere, así como la presidenta balear, que se ha sumado a las disculpas.

"Ha hecho lo que tenía que hacer cuando se comete un error: pedir disculpas. Y yo me sumo a ellas", ha asegurado Marga Prohens. La Fiscalía pide tres años de prisión para el acusado.