La calle por la que pasaba Alfredo Díaz para ir a la farmacia donde trabajaba como auxiliar luce ahora su nombre. La han renombrado los propios vecinos de Guillén Moreno, en Cádiz, para homenajearle tras su fallecimiento en la primera ola de la pandemia.

Sin embargo, quieren que el Ayuntamiento haga oficial el cambio de nombre. "Eso es un papel puesto ahí, aquí no ha venido el alcalde ni nada", señala un vecino. Otro ciudadano apunta sobre la iniciativa que "está bien" pero incide en que "eso es supuestamente a través del Ayuntamiento el que tiene que hacer el cambio de nombre de la calle".

Desde el Consistorio apuntan que la petición de los vecinos para darle una calle a Alfredo Díaz tiene que pasar por un trámite más, algo que será a mediados de septiembre.

En el caso de que se le conceda, tampoco está del todo claro que sea la misma vía en la que los vecinos han colocado la placa que reza 'Farmacéutico Alfredo Díaz', actualmente llamada Pleamar por la obra de Rafael Alberti.

De momento, el nombre de Alfredo sigue allí escrito como homenaje, un recuerdo que llega desde el corazón, al igual el mural que la artista Marina Capdevila ha pintado en la residencia de mayores Puig d'en Roca, en Girona, en recuerdo de las víctimas de coronavirus que murieron en las residencias.