Las salas de urgencias pediátricas están colapsadas en algunos hospitales de Madrid. "Estamos batiendo retos de pacientes atendidos prácticamente todos los días", ha indicado David Andina, vocal de la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas.

El motivo, según ha explicado Concha Sánchez Pina, pediatra y presidenta de AEPAP, es que "hay muchísimos niños con fiebre, con dificultad respiratoria y tos, y desgraciadamente las plazas de pediatría en Madrid han bajado de número".

En algunas unidades de Urgencias se atienden hasta un 40% más de casos que antes de la pandemia. El motivo es la confluencia de la bronquiolitis con la gripe y el coronavirus. Un combo que está disparando las consultas pediátricas, especialmente en los menores de 4 años.

Es algo que ya había pasado otros años, pero en esta ocasión, explica el pediatra, ha llegado "antes": "Es como si fuera un mes de diciembre, pero a lo bestia". Ante este aumento, en la Comunidad de Madrid, la Consejería ha tenido que reforzar los hospitales con 350 profesionales más.

Uno de estos centros es el hospital Infanta Sofía, donde explica la doctora Elena Cabrerizo "las camas de pediatría son camas calientes: niño que se va de alta, niño que ingresa en la planta porque no da tiempo a que esté libre la cama ni un solo segundo".

Además, en las urgencias generales de varios hospitales de esta comunidad autónoma siguen faltando manos desde hace días y temen que con la huelga de Atención Primaria y de pediatras se complique aún más. "Hay personas en los pasillos porque ya no caben en urgencias y no hay camas para ellos", ha indicado Guillén del Barrio, enfermero.

Sin embargo, la situación no es exclusiva de Madrid. Las urgencias pediátricas de todo el país están experimentando un alto volumen asistencial. La Sociedad Española de Urgencias Pediátricas reclama planes contingencia para evitar los retrasos que se están produciendo en la atención a los menores.