El director del centro ha asegurado que, tras investigar el caso, la universidad ha decidido identificar y expulsar a la mujer, siguiendo los valores religiosos y las tradiciones del islam suní que promulga Al Azhar.

El castigo, según ha asegurado el portavoz, tiene que ser ejemplar y coherente con los valores conservadores de la universidad, a pesar de que los hechos se produjeron en un campus diferente al lugar de estudio de la mujer.

En el vídeo, la pareja de la joven se arrodilla con un ramo de flores para pedirle matrimonio y tras la respuesta afirmativa de la mujer, él la abraza y la levanta en brazos. Un gesto que tuvo lugar en el campus de Mansura, al norte de país.

El vídeo no ha estado libre de polémica después de que se conociera la decisión del centro educativo de expulsar a la joven.