El padre de Jenny falleció hace un año, y a la espera de su noveno hijo y siguiendo los pasos de su padre, con ganas de sorprenderse siempre, decidió que no sabría el sexo de su bebé hasta el momento de su nacimiento.

Sin embargo, sus amigas le querían organizar una fiesta y estaban ansiosas por conocer el sexo del pequeño, así que, tras su insistencia, Jenny le dijo a James, su marido, que le dijera el sexo de su bebé de la manera más original posible.

El marido ha contado a la CNN cómo se pasó toda una noche trabajando para obtener el resultado final. Gracias a una recopilación de notas de voz que había enviado el fallecido a su hija, James consiguió que fuera el padre de Jenny el que revelara el sexo del bebé.

"Hola Jenny, soy tu padre. Quiero que sepas que es una niña", decía la nota de voz. Al final, esta fue la mayor sorpresa que Jenny podría haber esperado y no pudo contener las lágrimas. "La última persona a la que esperaba escuchar era a mi padre", ha contado.