Eloy es vecino de Tafalla y nos cuenta que se emociona y rompe a llorar al asomarse a su casa tras la tromba de agua porque al ver el paisaje de estos días sólo puede sentir una gran "congoja". Ahora está precintada por peligro de derrumbe después de que el agua se llevara por delante un muro que reventó por la presión.

Muchos vecinos de Tafalla cuentan cómo fueron arrastrados por el agua y se salvaron por los pelos. "De la inercia del agua me quedé sin zapatos, sin pantalones y casi desnudo, casi me lleva", nos cuenta uno de ellos.

A Vicen, la tromba de agua le pilló dentró de su tienda de novias y tuvo que ser rescatada: "Entró una ola de barro y me tiró al suelo hasta que al final me sacaron a pulso entre mi marido, mi cuñado y la policía".

De momento, imposible cuantificar los desperfectos mientras otros intentan localizar sus coches, que están esparcidos por toda la localidad tras ser arrastrados.

El agua también corría violentamente junto a un restaurante en Pueyo, donde quedaron atrapados algunos de los que estaban dentro, que se tuvieron que subir a una terraza hasta ser rescatados. "Pasamos mucho miedo", cuenta uno de ellos.

Todos son conscientes de que quitarse el susto y volver a la normalidad será cuestión de meses.