Estuvo detenido por golpear e insultar a una mujer embarazada en Barcelona en agosto, se le acusó de un delito de odio porque la víctima era musulmana y llevaba niqab

Pero, no era la primera vez que estuvo implicado en este tipo de delitos. Hace 25 años fue condenado a pagar 100.000 pesetas por encubrir el asesinato de Sonia Rescalvo, una joven transexual. Uno de los primeros crímenes en España por homofobia.

La activista LGTB Carla Antonelli explica que "Sonia fue y es un símbolo contra los crímenes de odio en España. Fue la primera vez que la Justicia se preocupó y mandó abrir una investigación profunda".

El crimen se cometió en el parque de la Ciutadella de Barcelona. Murió tras ser brutalmente golpeada a patadas por varios jóvenes vinculados a grupos radicales de extrema de derecha. Dos de ellos relataron al día siguiente los hechos al agresor de Barcelona, que no denunció.

Desde los colectivos LGTB piden que las sentencias ahora sean más duras para evitar la reincidencia de estos crimenes. Los seis asesinos fueron condenados a prisión, pero ninguno de ellos se arrepintió de lo sucedido.

"No tengo ningún tipo de remordimiento", dijo en 'Cuerda de presos' 1996 Oliver Sánchez, acusado de asesinar a Sonia.

Ahora se recuerda a Sonia en un glorieta para que nadie olvide lo que su nombre representa.