Los Mossos d'Esquadra investigan si tras la muerte de un menor que se cayó por una claraboya desde un sexto piso está la peligrosa moda de hacerse fotos desde las alturas. El chico de 15 años subió hasta allí con un amigo y, según unos vecinos, ya habían estado merodeando por el lugar el día anterior.

Primero puso un pie sobre uno de los cristales de la claraboya, y parecía que aguantaba. "Estaban en un edificio e intentaban pasar a otro", explica uno de los vecinos. Pero justo a mitad del recorrido, el vidrio se rompe y el joven cae al patio interior desde la altura de un sexto piso. Le acompañaba un amigo. "Estaba asustado y me dijo que se había caído", continúa detallando el vecino.

Habrían accedido al techo acristalado que une unos bloques de Amposta, en Tarragona, desde el ático. "Subieron unos vecinos y vieron que no estaba cerrada la puerta", comenta otra de las residentes en el edificio.

Según las investigaciones de los mossos, era el segundo día que venían. Un día antes acudieron para estudiar los accesos con un tercer joven que habría declarado que estaban buscando una nueva ubicación para grabar imágenes temerarias desde las alturas.

"Hoy en día está de moda hacerse vídeos en sitios peligrosos por los 'likes' de las redes sociales", concluye la vecina. La caída le provocó politraumatismos que le causaron la muerte.