El conselleiro ha señalado que la situación está "más tranquila", ya que aminoró el viento y se disipó la basta columna de humo, de forma que estimó que "no existe peligro para las vidas".
Sobre los vecinos del lugar de Barro que fueron desalojados de sus hogares, ha indicado que "por precaución" fueron conducidos a la iglesia de la parroquia de Gargamala y hasta el lugar se desplazaron ambulancias por si se registraban problemas respiratorios a consecuencia del intenso humo que había en la zona y dado que muchos son personas mayores.
Según sus datos, ningún vecino requirió asistencia médica y en torno a esta medianoche, se realizan las comprobaciones necesarias para permitir a los desalojados volver a sus casas. Al respecto, estimó que los vecinos podrán pasar la noche en sus domicilios y no se encontrarán con noticias desagradables al volver porque "no llegaron a arder casas".
Acerca de las quejas de la teniente de alcalde de Mondariz, Mónica Peralba, quien criticó "la tardanza" en llegar de los medios aéreos, el conselleiro do Medio Rural calificó de "magnífico" el tiempo de reacción desde que se declaró el fuego y defendió el operativo destinado en las labores de control de las llamas.
Según los datos de Medio Rural, el primer medio en llegar al lugar del incendio fue precisamente un helicóptero y lo hizo 13 minutos después de declararse el fuego. Seis minutos después llegó el segundo helicóptero, hasta completar un total de diez, que sin embargo tuvieron que retirarse con la caída de la noche.
Los medios acumulados que trabajan en la zona son un técnico, ocho agentes, 25 brigadas, 16 motobombas, cuatro palas y un tractor. Según las nuevas estimaciones, la superficie quemada supera las 120 hectáreas.
El conselleiro do Medio Rural explicó, además, que no pudo enviarse un hidroavión a este incendio debido a la hora a la que se declaró, porque no hubiese dado tiempo a que llegase e hiciese alguna descarga, por lo que se optó por helicópteros, que son más rápidos.
Precisamente por la hora a la que se iniciaron las llamas y dado que el de este domingo es el quinto incendio en la zona desde el 1 de octubre, el conselleiro indicó que "da que pensar", aunque se remitió a las investigaciones posteriores para discernir si efectivamente fue provocado. "Ahora la prioridad es proteger a las personas", agregó.
Acerca del origen del fuego, por el momento la información que baraja la consellería es que este incendio, que se inició en la parroquia de Sabaxáns, cuenta con un foco. José González Vázquez pidió "prudencia" y "respeto" por la gente que está trabajando en las labores de extinción, aunque dijo entender que "la gente se ponga nerviosa" porque el humo iba hacia la aldea y el incendio se desarrolló en condiciones de viento.