Con semblante serio y concentrado, ha comparecido José Emilio Silvaje ante el juez. El exsacerdote ha negado el robo de tallas y objetos religiosos.

Ha dicho que nunca se llevó nada para lucrarse, sino para restaurarlo. Sí ha reconocido que donó objetos a este anticuario, ahora acusado de colaborar con él. José Emilio Silvaje ha afirmado que lo hizo porque "esas piezas eran basura inservible".

En su declaración, el excura se ha ensañado con los sacristanes. Con desprecio, les ha acusado a ellos de robar. "¿Los sacristanes? Esos eran 'borderline', con déficit psiquiátrico, eran subnormales profundos. ¡Si hasta me robaban el dinero de los cepillos!", ha dicho.

Silvaje estuvo durante cuatro años al frente de 12 parroquias de Lugo. Años en los que, sospechosamente para los vecinos, desaparecieron hasta 40 piezas litúrgicas, algunas encontradas poco después tiradas en una carretera.

"No hay ningún anticuario ni ningún particular que se arriesgue a comprar o una imagen así, o el Códice Calixtino", señaló el cura a laSexta.

Poco después de ser acusado, dejó el sacerdocio. Ha dicho que fue tras una visita a Auschwitz en la que le surgieron dudas en cuanto a su vocación. La Fiscalía pide para él cuatro años y medio de prisión.