El hombre estaba armado con un cuchillo de grandes dimensiones, algo parecido a un hacha de cocina, y se paseó por Baix Llobregat (Barcelona). Tras sembrar el pánico por las calles, un agente de la policía local de Viladecans lo redujo en plena calle.

Según han confirmado fuentes policiales al diario 'Público', el detenido causó varios altercados en la plaza de la Vila y después fue al mercado de la plaza de Europa donde se puso a pedir dinero a gritos.

Sería precisamente en ese mercado donde habría cogido el cuchillo de una pescadería y se habría paseado hasta que fue interceptado por la Policía.

Las imágenes fueron grabadas por una vecina y compartidas en Twitter por diferentes asociaciones de policías. En ellas se ve cómo el detenido amenaza con autolesionarse hasta que el agente se la quita con un golpe con la porra.