Llamas invadiéndolo todo, pegadas a las casas. El incendio en el municipio de Monforte de Lemos avanza sin tregua y ya ha devorado 350 hectáreas.
Ha sido el último en declararse en Galicia, sobre la una del mediodía, pero el viento favorable le ha dado alas. En el lugar trabajan 12 helicópteros, cuatro aviones y 22 brigadas para controlarlo.
Su fuerza ha obligado ya a cortar algunas carreteras y también a realizar los primeros desalojos, todos ellos de personas mayores o con problemas de movilidad por si acaso las llamas llegaran a afectar a las zonas habitadas.
Ahora la mayoría de los esfuerzos se centran aquí, pero este no ha sido el único incendio declarado en Galicia. El otro gran incendio de hoy ha sido en los alrededores de Porto do son, en A Coruña. Se han quemado 80 hectáreas.
Evoluciona más favorablemente, pero ha dejado imágenes de angustia como la de vecinos a los que el fuego había levantado de la cama trabajando codo a codo con los agentes para evitar que el fuego, con siete focos y que comenzaba a las seis de la maña, se adentrara en sus casas.
"Era una hecatombe, no se veía nada, toda la gente corriendo, helicópteros sobre nuestras cabezas...", relata un vecino que cuenta lo vivido.
Otros dos grandes incendios se han vivido en Ourense. Esta madrugada, en Cenlle, el fuego se iniciaba en en la parroquia de Barbantes y dejaba 40 hectáreas calcinadas. El otro, en Lobeira, ha arrasado 30 hectáreas. Afortunadamente ambos han sido estabilizados.
