La vista oral por la tragedia del Madrid Arena que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid ha comenzado pasadas las diez y cuarto de la mañana con la lectura de las conclusiones provisionales de la Fiscalía ante la presencia de los 15 procesados.
El empresario Miguel Ángel Flores se ha sentado en la primera fila del banquillo de los acusados mientras que el exjefe de la Policía Municipal Emilio Monteagudo se ha situado en la última fila de la 'sala cero' de la Audiencia, donde se celebra el juicio en medio de una expectación mediática sin precedentes en la comunidad.
Desde primera hora de la mañana, la presencia de medios de comunicación ha sido masiva a las puertas de la Audiencia Provincial, donde poco a poco han ido llegando todos los imputados en el caso.
Flores ha sido el más madrugador y ha entrado en las dependencias judiciales a las 09.17 de la mañana, si bien no ha hecho declaraciones a los medios. No así su letrado, que ha anunciado que presentará nuevas pruebas periciales y testificales en la primera sesión del juicio, dedicada a las cuestiones previas.
Eso sí, en este primer día no han acudido familiares de las cinco jóvenes que perdieron la vida en la noche de Halloween, aunque algunos han adelantado que asistirán a la declaración de Flores, que será el primer acusado en responder a las preguntas de las partes.
La Sección Séptima será el tribunal encargado de enjuiciar los hechos, que estará encabezado por la presidenta Luisa Aparicio Carril, mientras que la ponente será Ángela Acevedo. Quince acusados se enfrentarán a peticiones de condenas de la Fiscalía que oscilan entre los cuatro años y los dos años y medio de prisión. Solicitudes de condena que no satisfacen a las familias, como tampoco que no haya ningún político procesado.
La primera sesión del juicio se inicia con las cuestiones previas, que podrían prolongarse un día más, lo que aplazaría al jueves la declaración de Flores, que será el primero en responder a las preguntas de las partes. Fuentes jurídicas han explicado que las partes tratarán de solicitar la inclusión de nuevas pruebas durante la formulación de las cuestiones previas, que es posible que se discutan a puerta cerrada.
No será por lo tanto hasta la segunda o tercera jornada del juicio cuando declare el principal acusado en el caso. Le seguirán los 14 procesados restantes hasta el 9 de febrero, en sesiones de mañana los martes, miércoles y viernes de cada semana.
Después se dará paso al visionado de los vídeos y a la declaración de más de un centenar de testigos, entre ellos familiares de las víctimas mortales, heridos, asistentes a la fiesta que resultaron ilesos y policías nacionales y municipales.
Otros testigos citados son algunos empleados de las empresas de seguridad Seguriber y Kontrol 34, miembros del Samur y trabajadores de Madridec, que comparecerán antes del turno de los peritos y las pruebas documentales. Se espera que el juicio quede visto para sentencia en mayo.
