El marisco de la ría de Pontevedra está en peligro por culpa de una plaga de estrellas de mar. Estos organismos devoran almejas, navajas y mejillones de las bateas y ya se han convertido en la peor pesadilla de los pescadores, cuyo negocio ponen en jaque.

Tanto es así que la Xunta de Galicia ha autorizado a las cofradías de la zona a retirarlas hasta el 31 de agosto. "Al día, tranquilamente, sacamos una tonelada", indica el buzo Dani García.

Y ello a pesar de que para extraerlas del fondo marino no cuentan con ningún instrumento, sino que únicamente usan las manos: aún así, en apenas 10 minutos llenan hasta arriba los sacos de red.

Dentro de la mayor parte de ellas, los buzos se encuentran con la concha de algún molusco, que la estrella previamente ha dejado limpia tras recubrir a su víctima, asfixiarla y comérsela."Lo primero que se come es la almeja, que está casi a ras de la arena", detalla García.

Según los marisqueros, una presencia tan masiva no es normal. "Este año hay más de lo normal, porque las quitamos y al cabo de 15 días vuelven a aparecer", explica el marisquero Juan Albar.

Iago Tomé, patrón mayor de la cofradía de Raixó, indica el peligro que suponen estos organismos para el sector. "Claro que hay preocupación porque es de lo que vivimos", lamenta, "están acabando con la cosecha que tenemos para los próximos años".

Por ello, las cofradías de pescadores reclaman ayudas a la Xunta para compensar las pérdidas y porque, dicen, no cuentan con brazos suficientes para acabar con ellas.