Este lunes ha llegado una nueva remesa de 350.000 vacunas de Pfizer/BioNTech, aunque no ha sido fácil. A pesar de que la distribución de las dosis se ha podido materializar en diferentes aeropuertos del país, las consecuencias del temporal Filomena, aún en este momento, dificultan su transporte completo.
Según ha explicado Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, en una entrevista en Radio Nacional España, "se garantiza la distribución" de las vacunas: "Cualquier retraso va a ser muy mínimo en el tiempo", asegura.
El mandatario también indica que las dosis también tendrán garantizado el acceso a almacenes como el de Ciempozuelos. Precisamente, el transporte en esta localidad es uno de los más complicados hasta el momento. Así lo afirma José Manuel Franco, delegado del Gobierno en Madrid, que ha sido entrevistado en el programa 'Más de uno': "Las placas de hielo en Ciempozuelos están dificultando la llegada de una parte de las vacunas al centro logístico", ha expresado ante el micrófono de Onda Cero.
Más dificultades en Madrid: se retrasan las inyecciones
Los problemas en la distribución de la vacuna se han agudizado en diferentes puntos. Fuentes del Ministerio de Sanidad han informado, en unas declaraciones recogidas por la Agencia EFE, de que en Madrid ha habido que desviar un vuelo al aeropuerto de Foronda, en Vitoria. Sin embargo, se trata de una contingencia ya prevista desde ayer, en el caso de que Barajas no abriera completamente sus operaciones.
Una de las principales preocupaciones con respecto a las consecuencias del temporal gira en torno al ritmo de vacunación. En esta línea, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado esta mañana en una entrevista con esRadio que las inyecciones "se han retrasado un poco". También ha indicado su estado actual: "Ponemos 1000 vacunas al día y hay que reservar la segunda dosis. Ya hemos empezado por el personal sanitario, y cuando se recupere la movilidad iremos más rápido", sentencia.
Por otra parte, este domingo el propio Marlaska apuntaba que la logística estaba "totalmente preparada". Es decir, que las vacunas podrían ser transportadas a Madrid por carretera, salieran de Vitoria o Barajas. Un hecho que también ha recalcado José Luis Ábalos, ministro de Transportes, que ha destacado la importancia de garantizar el suministro de bienes y servicios esenciales.