Martin Nye, un hombre alemán de 48 años, está en el punto de mira de las autoridades. El hombre, condenado desde 2011, cuatro años después de que se viera por ultima vez a la pequeña Madeleine, fue acusado de violar a 48 niños y matar a tres de ellos.

Ahora, ocho años después de que un juez le condenase a cadena perpetua en Alemania, las autoridades creen que podría tener relación con la desaparición de Madeleine, ya que se encontraba en la zona donde despareció la niña británica en mayo del 2007, el Algarve portugués, al que acudía habitualmente.

Además, los rasgos faciales del sospechoso coinciden con un retrato robot que realizó la Policía portuguesa sobre el posible sospechoso gracias a la ayuda de varios vecinos que observaron la actitud extraña de un ciudadano que merodeaba la zona del apartamento de la pequeña.

El retrato robot del sospechoso en el 'Caso Madeleine'

Martin Ney fue condenado por asesinar a un niño de 13 años en 1992, otro de ocho en 1995 y otro de nueve en 2001. Además, el pedófilo alemán es el principal sospechoso del asesinato de otros dos menores, un niño holandés en 1998 y otro pequeño en Francia durante el año 2004.

Madeleine McCann desapareció días antes de cumplir cuatro años, mientras pasaba unas vacaciones junto a su familia en Praia da Luz, en el Algarve portugués. La menor se había quedado sola en casa junto a sus hermanos.

Ney siempre actuaba de la misma manera. Era conocido como 'el monstruo enmascarado' porque acechaba a sus víctimas vestido de negro y con una máscara que le tapaba la cara. A pesar de que fue investigado, en un primer momento se descartó su implicación en el caso por la tendencia del depredador sexual de agredir a menores de género masculino, tal y como ha informado el medio británico 'The Sun'.

Ahora, los nuevos indicios desde Reino Unido ponen el foco en el depredador sexual alemán. Los investigadores sospechan que, en caso de que fuera también el culpable del asesinato de otros dos menores en 1998 y 2001, la desaparición de la pequeña Maddie coincidiría con un patrón: el pedófilo actuaba cada tres años.

Gonzalo Amaral, exjefe de la investigación de Madeleine, ha asegurado en una entrevista que "el fin de la investigación" podría estar cerca tras la investigación de un sospechoso: "Un pedófilo alemán que está en prisión en este momento".