Los Bomberos de Cataluña han dado por estabilizado elfuego enCorbera d'Ebre, en Tarragona, en la madrugada de este viernes, que ha quemado más de 375 hectáreas. Mientras los efectivos continúan luchando contra varios incendios más en la provincia de Lleida.
En concreto, según han informado a primera hora de la mañana, se mantienen contenidas las zonas este, norte y sur del incendio que afecta a Artesa de Segre, si bien el frente oeste continúa activo. Allí, durante la noche han trabajado unas 40 dotaciones con línea de agua y fuego técnico. El flanco que desciende hacia Sant Mamet -apuntan- se va estabilizando solo en los roquedos y rompientes. El perímetro está controlado y quemando por la zona prevista. Se ha pedido ayuda a los agricultores y se investiga la causa del incendio.
Por su parte, el incendio forestal en Castellar de la Ribera está estabilizado después de arrasar 329 ha. Se ha determinado que fue provocado por un rayo. En declaraciones a TV3, la alcaldesa de Castellar de la Ribera, Claustre Sunyer, ha explicado que aún así este viernes será un día complicado debido a las altas temperaturas, por lo que ha pedido "no bajar la guardia". Ha celebrado que el fuego no haya causado daños humanos y que "se hayan podido salvar las casas" de los vecinos, aunque ha lamentado que campos y bosques de la zona hayan quedado destruidos.
Mientras, el fuego en Lladurs es el que más preocupa en la zona de Solsonès, por las condiciones y el potencial. Sigue activo y los Bomberos advierten de que su flanco derecho es muy alargado y el perímetro está muy inestable.
El jefe de Bomberos de la Generalitat, David Borrell, alertaba sobre el incendio de Lladurs, con potencial para quemar hasta 50.000 hectáreas, por lo que avanzaba que se pondrían "todos los esfuerzos" para tratar de estabilizarlo.
Ya el jueves, las altas temperaturas, que en muchas localidades superaron los 41 grados (como los 41,3 en Baldomar, en Artesa de Segre) complicaron el trabajo de los equipos de extinción, con efectivos de las Agrupaciones de Defensa Forestal, Protección Civil, Mossos d'Esquadra y la ayuda de agricultores -arando los campos para frenar la progresión del fuego- y efectivos de Cruz Roja, así como de la Unidad Militar de Emegencias (UME).