Seat y Volkswagen llamarán a revisión a 420.000 vehículos de los modelos Seat Arona, Seat Ibiza y Volkswagen por un problema en el cinturón de seguridad del lado izquierdo trasero ya que, según informan, "existe la posibilidad de que se desabrochen inintencionadamente".
Las compañías informan de que han comprobado que el cambio brusco de un carril a otro con cinco pasajeros dentro de los coches hace que ese cinturón quede desabrochado. El grupo recomienda que no se utilicen los asientos centrales de la parte trasera de esos modelos "hasta que el coche haya sido equipado con la nueva fijación del cinturón de seguridad".
A pesar del aviso, el grupo ha asegura que el fallo sólo ocurre "en determinadas ocasiones" y "se ha identificado una solución técnica que evita que ocurra". Los clientes afectados recibirán en las próximas semanas una carta para concertar cita con un servicio oficial y reparar el error de forma gratuita.
