Pearline Baugh, de 62 años, ha sido condenada a cuatro meses de prisión después que los padres del joven al que cuidaba, con 20 años, autismo y epilepsia, vieran a través de una cámara en el domicilio el trato que proporcionaba a su hijo.

En el vídeo, difundido por la Policía de West Midlands, en Reino Unido, se puede ver a la cuidadora realizando movimientos bruscos e incluso empujando al joven. "Estoy desconsolada, lo que vi en esos vídeos me destruyó", aseguraba la madre del joven al diario 'Birmingham Live': "Confié en Pearline Baugh y se convirtió en un miembro de la familia, pero era una buena actriz. Es malvada".

Según su testimonio, la madre del joven recriminó su actitud a Baugh, que negó lo ocurrido y se fue de la casa. Según ha testificado, ni siquiera había instalado la cámara para vigilar a la cuidadora de su hijo, sino para controlar que estaba en buen estado cuando se encontraba en otras habitaciones desde las que no podía observarlo. "Pearline incluso era consciente de la cámara: no estaba oculta", ha explicado al citado medio británico.

La madre ha asegurado estar desconsolada, y ha explicado que fueron las diversas patologías de su hijo las que provocaron que buscase ayuda en una persona externa. Los hechos ocurrieron en 2019, aunque el vídeo ha salido a la luz tras la sentencia condenatoria.