La Audiencia Provincial de Zaragoza ha condenado a Rodrigo Lanza a cinco años de cárcel por la muerte de Víctor Lainez en el conocido como 'crimen de los tirantes'.
En la sentencia, que se ha hecho pública este martes, se le acusa "de un delito de lesiones dolosas de los artículos 147, 148.2 del Código Penal -alevosía- en concurso ideal con un delito de homicidio imprudente del art. 142 del mismo texto legal".
Además, el condenado tendrá que pagar una indemnización de 200.000 euros más intereses en concepto de responsabilidad civil, que se distribuirán entre los progenitores, cada hijo y cada uno de los tres hermanos del fallecido.
De la misma manera, Rodrigo Lanza tendrá que indemnizar al Servicio Aragonés de Salud en la cantidad de 5.620 euros, más intereses legales.
El Ministerio Fiscal, la acusación particular, ejercida por la familia de la víctima, y la acusación popular, que representa Vox, solicitaron una pena de 25 años de prisión por asesinato con las agravantes de alevosía y motivación ideológica. Mientras que el abogado de la defensa, Endika Zulueta, había solicitado la absolución.
Los hechos que recoge la sentencia
El pasado 15 de noviembre el jurado popular declaró que Rodrigo Lanza era culpable de un delito de lesiones con imprudencia y resultado de muerte, que le costó la vida a Víctor Lainez en diciembre de 2017 en en el bar 'El tocadiscos' de la capital aragonesa.
Según recoge el escrito de la sentencia, en el veredicto emitido por el jurado popular se declaran como hechos probados que Rodrigo Lanza le dijo a sus acompañantes que la víctima le llamó "sudaca" y en dicha conversación el condenado le llamó "fascista" y "facha".
"Sin posibilidad alguna de defensa le dio un golpe seco en la cabeza"
Además, se recoge que el condenado y sus acompañantes percibieron que Lainez "no paraba de escribir en su móvil, pensando que estaba contactando con otras personas y que podía haber problemas, por lo que abandonaron el local". Tras esto, se marcharon seguidos de Lainez y el condenado se abalanzó sobre él "sin posibilidad alguna de defensa, dándole un golpe seco en la cabeza".
"Como consecuencia del golpe, Victorino Lainez cayó al suelo desplomado, quedando inconsciente, y una vez en el suelo Rodrigo Andrés Lanza le dio una patada en la cara e inmediatamente se colocó encima siguiendo propinándole puñetazos en la cabeza y múltiples golpes, tras lo cual salió del local y se marchó", señala el escrito.
Consideran no probado que la víctima llevara unos tirantes con la bandera
Otro de los hechos que se considera probado es que la víctima no portaba "una navaja u otro objeto semejante ni forcejeó con Rodrigo Lanza en actitud agresiva o violenta".
En cuanto a los hechos no probados, el escrito judicial recoge que Lainez no hizo ningún gesto al condenado para que se acercara y que "tampoco le dijo Rodrigo Andrés Lanza a Victorino Lainez que llevaba tirantes con la bandera española".
Tampoco consideran probado que el agresor bebiera "una diversidad de bebidas alcohólicas que afectaran a su capacidad de darse cuenta de lo que hacía" ni que "sufriera un estado de pánico" al pensar que la víctima llevara "una navaja".