Los Mossos d'Esquadra resuelven el crimen de Ana María Milán. Su cuerpo aparecía sin vida el 28 de febrero de 2007 en la trastienda de una zapatería de Sabadell.

Fueron unos clientes los que encontraron su cuerpo en un charco de sangre.

El cadáver presentaba heridas de arma blanca y la caja registradora estaba vacía, por lo que la principal hipótesis apuntaba a un atraco justo antes de la hora del cierre.

La dependienta, de mediana edad, llevaba 30 años trabajando en este establecimiento, frente al que esa noche esperaba su hijo destrozado.

La inspección ocular duró más de cuatro horas. Los agentes, incluso, llevaban encima fotografías de posibles sospechosos. Ahora, 12 años después, los Mossos dan con el presunto asesino: un hombre de 68 años, de nacionalidad española y vecino de Sabadell.

El arrestado ha pasado a disposición judicial y se encuentra en libertad provisional con cargos.