Los Príncipes de Asturias, la infanta Elena, en su calidad de duquesa de Lugo; el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, encabezan la lista de las numerosas personalidades que han asistido al funeral.
El arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, ha abierto su homilía con un recuerdo "orante" para los heridos que siguen en los hospitales y les ha deseado una pronta recuperación.
De manera especial se ha dirigido a las familias de las víctimas para expresarles el apoyo de "todos", y ha tenido también un recuerdo para las 38 víctimas del accidente de autobús ocurrido en Italia.
"Desde el primer momento os hemos tenido en nuestro corazón como también a ellos. Os ha llevado en su corazón Galicia y España y tantas personas. Cardenales, obispos, religiosos y laicos más allá de nuestras fronteras me han pedido que os transmita sus condolencias con su oración y solidaridad", ha afirmado el prelado.
Barrio ha destacado que, muy especialmente, desde el primer momento el papa Francisco "acompañó a Galicia en su dolor con su cercanía espiritual, con su fraterno afecto y su emocionada solidaridad". "Se lo agradecemos vivamente. En el atardecer de un día que se presentaba festivo, la noticia del accidente ferroviario sobrecogió nuestra alma que buscó en la oración el sosiego para encomendar al Señor a los fallecidos, pedir la recuperación de los heridos e implorar el consuelo y la serenidad para las familias de las víctimas", ha agregado.
El arzobispo ha ensalzado la labor de todos aquellos que se desvivieron para atender a las víctimas, y el "esforzado" trabajo de cuantos colaboraron para paliar el inmenso dolor que siguió al siniestro. "También nuestros sacerdotes ofrecieron su disponibilidad. Signos de luz en el misterio de la muerte y el dolor. Vivimos en la certeza de la Palabra de Dios y Cristo nos dice: 'Yo soy la resurrección y la vida, todo el que cree y vive en mí no morirá para siempre'", ha añadido.
A continuación ha proclamado: "Con este convencimiento quisiera, queridas familias, enjugar vuestras lágrimas y aliviar vuestro dolor". Barrio ha precisado que hubiera preferido acompañar a las familias "sencilla y afectuosamente" en el silencio de la oración, pero ha afirmado que al presidir esta Eucaristía les ofrece el "consuelo" de parte de Dios Padre. "No necesitamos otro consuelo, ni nos es precisa a los creyentes otra razón para vivir con esperanza y para morir con sosiego, que esta luminosa afirmación del Apóstol Pablo.
Estar siempre con el Señor, saborear su fidelidad y participar de su gloria", ha proclamado Barrio. El prelado ha señalado: "Solo esta esperanza puede consolar adecuadamente la pérdida de unos seres queridos y dar sentido a sus vidas y a sus muertes, reanudar un diálogo con ellos que la muerte interrumpió bruscamente y consolidar los vínculos de una comunión real". "Al Santo Apóstol Santiago y a nuestra madre la Virgen María les pedimos que hayan peregrinado con ellos hasta el Pórtico de la Gloria celestial.
Nada podrá arrancarnos del amor de Dios, nuestra paz y fortaleza", ha concluido. Han concelebrado el funeral junto a Barrio los obispos de Ourense, Astorga y Quebec, José Leonardo Lemos, Camilo Lorenzo y Lionel Gendron, respectivamente, y el secretario general de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, entre otros prelados.