El cambio de hora está incorporada al ordenamiento jurídico español por Real decreto 236/2002, de 1 de marzo. Pero su duración está limitada. El 15 de marzo de 2022 el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó una orden ministerial que recordaba que el Consejo de Ministros del 7 de septiembre de 2018 se creó una Comisión de 14 personas expertas para el estudio de la reforma de la hora oficial, encargada de la elaboración de un informe de evaluación de las disposiciones reguladoras del cambio horario, así como sobre la conveniencia de mantener en el país la hora de Europa central.

Dicha comisión habló en 2019 y dijo que no era aconsejable producir ningún cambio precipitado en los husos horarios mientras no existiese un consenso compartido y una difusión práctica a los ciudadanos de los riesgos y oportunidades que comporta. Pero lo relevante de todo ello es que este documento fija que el cambio de hora seguirá sucediendo hasta 2026, cada última madrugada del sábado-domingo de octubre, para iniciar el horario de invierno, y cada madrugada del último sábado-domingo de marzo, cuando se pasará al horario de verano. Así pues, la madrugada de este sábado al domingo, 31 de marzo, los relojes cambian la hora y a las 02:00 serán las 03:00.

Por qué se cambia la hora

El cambio de hora en Europa se remonta a la década de los 70, con la primera crisis del petróleo, cuando algunos países decidieron adelantar el reloj para aprovechar mejor la luz natural del sol y consumir menos electricidad en iluminación. Desde 1981 se aplica como directiva que se renovaba cada cuatro años hasta la aprobación de la Novena Directiva, del Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión, en enero de 2001, que establece el cambio con carácter indefinido.

Argumentos en contra

La organización sin ánimo de lucro Time Use Initiative (TUI), que promueve el derecho al tiempo en todo el mundo, ha exigido el fin del cambio de hora en Europa en los programas electorales que se presentarán de cara a las próximas elecciones en Parlamento Europeo (9 de junio). La petición de la plataforma, cuyo principal objetivo es fomentar el debate público sobre cómo organizar colectivamente el tiempo para mejorar el bienestar de los ciudadanos, coincide con el cambio de hora en los relojes europeos el próximo 31 de marzo. Según ha informado este lunes la entidad, poner fin al cambio de hora estacional para 2026 es una de las 12 medidas incluidas en el Manifiesto de la UE sobre políticas de tiempo impulsado por la TUI para garantizar el derecho al tiempo en Europa.

  • La organización ha defendido que la UE debe poner fin a los cambios de hora estacionales porque cambiar los relojes a una zona horaria incorrecta "afecta negativamente a la salud individual y colectiva, así como a la economía".
  • También ha especificado que, en los últimos 30 años, "se ha demostrado que vivir en zonas horarias equivocadas tiene un impacto negativo en el ahorro de energía, en el riesgo de padecer cáncer y otras enfermedades, en el rendimiento de trabajadores y estudiantes, o en el PIB, entre otras cuestiones".
  • Según la organización, un 20 % de los ciudadanos europeos y un 34 % de las mujeres con hijos "sufren pobreza de tiempo", lo que les supone "afectaciones tanto al bienestar individual como a la cohesión social".

De acuerdo con la TUI, el hecho de que no se hayan implementado cambios en este aspecto responde a "creencias y mitos sobre la necesidad de mantener el horario de verano que persisten entre la opinión pública y el debate político". Uno de ellos es que el horario de verano ahorra energía, a lo que la plataforma responde que este "podría estar haciendo gastar más energía, dados los patrones de consumo actuales, que aumentan el gasto en refrigeración y calefacción".

Otro mito que señala la TUI es que el fin del cambio de hora podría perjudicar a la economía, especialmente a ciertos sectores como el turismo, el ocio o el comercio al por menor. Por lo que respecta a este argumento, los expertos mencionan cuestiones como que la actual configuración ya provoca faltas de sueño y, por tanto, menos productividad y accidentes laborales, o que no es el horario de verano, sino el verano y el buen tiempo lo que impulsan el turismo y el ocio.

Y sobre la creencia de que acabar con los cambios de hora suponga cambiar los hábitos diarios, la TUI menciona el argumento de la Alianza Internacional para el Tiempo Natural (IANT) que asegura que, dado que los hábitos ya son constantes durante todo el año en cuanto a la hora , pueden seguir siendo los mismos.