Nahum Méndez, geólogo y divulgador científico, ha afirmado que el desprendimiento del cono volcánico "no supone un peligro directo para las personas". "De hecho, el mayor peligro podría ser para los científicos y la UME que están trabajando en el terreno", ha señalado.

En este sentido, Méndez ha indicado que estos días se han visto "episodios en los que los conos han crecido y se han desmoronado, o casi derretirse como una vela y eso es totalmente normal en un proceso de erupción estromboliana".

En lo referente a qué efectos tendría el desprendimiento del cono, el experto ha dicho que, "en principio, lo único que se puede prever es un problema a nivel muy localizado en la zona de desprendimiento del cono".

"Un problema que puede surgir es que si ocurre en una boca en la que se expulsa gran cantidad de lava que tiene un comportamiento más efusivo, podría dar lugar a una nueva colada de lava, pero por la posición en la que se encuentran los conos lo normal es que la colada de lava siguiera el camino de la principal", ha concluido.