La salida de Manuela Carmena del Ayuntamiento de la capital trajo consigo muchas lamentaciones, sobre todo de aquellos que aplaudieron en su día la interposición de Madrid Central, la zona de bajas emisiones del centro urbano de la capital por la que solo pueden circular taxis, autobuses y VTC, favoreciendo al peatón.

José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, y su equipo de Gobierno dieron un paso hacia delante cumpliendo su promesa de limitar la actuación de Madrid Central al haber comenzado la moratoria de multas aprobada por su partido con el apoyo de Ciudadanos. Una semana que muchos resumen en un "auténtico caos", aseguraban algunos vecinos de la zona.

La vuelta de Madrid Central estuvo cargada de polémica, unas polémicas que no cesan. El último hecho comentado es que la única estación de control de la contaminación atmosférica situada en el perímetro de Madrid Central dejó de emitir datos de contaminación durante la mañana del miércoles y algunas horas del martes.

Desde el PSOE hablan de "un apagón informativo" por parte del Ayuntamiento de Madrid, mientras que éste señala que la estación ha dejado de funcionar por un "fallo técnico" y justifican la causa del problema en que no es la primera vez que ocurre en ésta y otras estaciones como Plaza Elíptica. Fuentes del consistorio explican que "se trata de un fallo de las comunicaciones por un corte de suministro", que ya está solucionado.

Bajo la lupa de Europa

El comisario europeo de medio ambiente, Karmenu Vella, advierte que los niveles de contaminación registrados en Madrid y Barcelona -las dos grandes capitales de España- siguen superando los niveles máximos de contaminación atmosférica. Por ello, solicita urgentemente al ejecutivo español adoptar 'medidas adicionales' y así cumplir las obligaciones fijadas para el año 2020.

"Esto ocurre en unos días en los que el Ayuntamiento debe aportar ante el juez los datos de contaminación de Madrid para que decida sobre las medidas cautelares pedidas por el PSOE en el recurso planteado contra la moratoria", comenta Pepu Hernández, portavoz del PSOE, respecto al plazo que tienen el gobierno de PP y Ciudadanos para presentar alegaciones. Almeida ha pedido tres meses para conseguir una 'alternativa' en esta zona de bajas emisiones que "no esté agujereada ni parcheada".

Por el momento, se desconoce si de verdad ha sido por fallo técnico o por el ánimo de los populistas de tomarse la justicia por su mano y comenzar a cerrar Madrid Central poco a poco, sin levantar sospechas, aunque está pasando lo contrario.