El tiempo es una de las claves cuando se produce una parada cardíaca. Esteban López de Sa, jefe de Caridología del Hospital La Paz, explica a laSexta que lo que tiene que funcionar es la "cadena de la supervivencia".

Es imprescindible que reconozcamos que el corazón se ha parado y actuar inmediatamente. Hay que llamar a los servicios de emergencia pero además, empezar la reanimación.

Y es que más de 52.000 personas sufren cada año una parada cardiaca en nuestro país. Un 57% están fuera de un centro hospitalario y la mortalidad se sitúa en el 50%. Entre los que se salvan, las secuelas pueden ser muy graves. Siendo las neurológicas las más habituales.

Por eso es fundamental que estos pacientes lleguen a unidades especializadas, con protocolos estandarizados a pesar de que ese centro hospitalario esté más lejos.

Ahora, la Sociedad Española de Cardiología, junto a la de Medicina Intensiva, buscan conseguir un certificado para estos centros para que los pacientes sean trasladados hasta allí y así aumentar las probabilidades de sobrevivir y no tener secuelas.

En el vídeo vemos el caso de María González, que nos cuenta cómo vivió tras sufrir un ataque al corazón. El papel de una amiga enfermera en ese momento fue clave, una rapidez que es la clave en este tipo de situaciones.