Lo cierto es que todos los años hay quien se pregunta qué se celebra el 6 de diciembre, uno de los dos grandes festivos del último mes, que dan pie a disfrutar del último gran puente del año. Es curioso, porque es una jornada incluida en el calendario laboral, cada año, sin excepción, desde hace exactamente 40 años. En 1983, con la firma del entonces rey Juan Carlos I y del ministro de la Presidencia, Javier Moscoso del Prado y Muñoz, se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el real decreto por el que quedaba establecido el día de la Constitución como festivo cada 6 de diciembre, "aniversario de la ratificación de la Constitución por el pueblo español".

Y esto es, precisamente, lo que se celebra cada año este día. Cinco años antes de su institución como día no laborable, y tres años después de la muerte del dictador Francisco Franco, España entró en un periodo de cambio y transición hacia la democracia. No fue hasta 1978 cuando, en referéndum, la mayor parte de los votantes españoles aprobaron la Constitución española, en la segunda gran votación democrática de la época, tras las primeras elecciones generales, las de 1977.

Aprobada el 6 de diciembre de 1978, la Constitución no entró en vigor hasta el 29 del mismo año. La redacción de la Constitución española venía de las negociaciones y acuerdos entre los diferentes partidos con representación parlamentaria y es, según recogen desde la página web de la Moncloa, calificada como la "Constitución del consenso".

Vista general durante al acto institucional del Día de la Constitución

Cada año, el 6 de diciembre las instituciones del Estado realizan diferentes actos públicos, nacionales y territoriales, mientras que gran parte de los trabajadores del país disfrutan de un día de descanso. El 6 de diciembre, además, está enmarcado en lo que popularmente se conoce como puente de diciembre o puente de la Constitución, por su proximidad con el siguiente día festivo: el 8 de diciembre.

En 2023, al coincidir el 6 de diciembre en miércoles y el 8, en viernes, abre la posibilidad a miles de personas a disfrutar de un 'acueducto' si pueden pedir el jueves como día libre. De esta manera, los más afortunados llegan a tener cinco días seguidos de descanso, algo agradecido y para muchos necesario, antes de terminar el año. Los 'afortunados intermedios' alargan el fin de semana a tres días, aunque sumen el día 6 como no laborable suelto.

Este es uno de los puentes que más movimientos provoca en España. De hecho, para este año se prevén unos 7,8 millones de desplazamientos por carretera, un incremento del 17,13% con respecto al mismo puente de 2022 y del 10,4% si se compara con 2017, último año en el que los días 6 y 8 de diciembre fueron miércoles y viernes, respectivamente. Precisamente por eso la DGT ha tenido que desarrollar un fuerte dispositivo con medidas de regulación, ordenación y vigilancia del tráfico desde el 5 de diciembre hasta el domingo, 10 de diciembre.