Montar el belén es una de las tradiciones más arraigadas en estas fechas previas al periodo estival navideño, y una de las que suscita mayor ilusión. En el montaje del nacimiento es importante cualquier detalle, también el musgo. Y hay quien lo busca directamente de la naturaleza.
Un hecho que, además de dañar el medioambiente, puede causar estragos a nuestro bolsillo. Arrancar el musgo del monte para llevárnoslo a casa está totalmente prohibido. Su función en la naturaleza es clave, mucho más allá de ser el suelo del pesebre porque, aunque por fuera no lo veamos, dentro y debajo del musgo está lleno de vida. Por ello, existen alternativas al musgo para nuestro altar navideño, e incluso hay musgo natural que se vende certificado, de producción controlada.
El ansia por su uso es tal que la Guardia Civil ya ha detectado los primeros delitos de la temporada. Este mismo viernes, ha incautado en una furgoneta 300 kilos de muérdago en la AP-2. Según la investigación, los responsables pretendían comercializar con ella en esta época navideña.
