Más de 300.000 animales son abandonados cada año en nuestro país, una cifra que nos sitúa a la cabeza del abandono en Europa. Una situación que genera una gran preocupación y que son todo un problema para las protectoras, que ahora mismo están desbordadas.

Por este motivo, piden leyes más duras para que se obligue a castrar a las mascotas y que se controlen los criaderos ilegales.

Unas medidas con las que quieren evitar que se sigan viviendo situaciones como las que sufren en una protectora de Punta Umbría, en Huelva, donde cada día llegan dos ó tres perros nuevos. Un problema que provoca que sus propietarias tengan que poner dinero de su bolsillo para poder mantener las raciones de comida, y que no tengan tiempo casi ni para acariciarlos.

"Les da pena castrarlos y no les da pena de tirar los animales a la calle", denuncia Mari Carmen Mayol, presidenta de Puntanimals.

En una protectora de Madrid, desvelan que también han visto cómo la pandemia ha aumentado el abandono. "Tenían al perro todo el día en casa y ahora que salen, tienen ansiedad, y eso genera un gasto de educador, y lo abandonan".

La solución pasa porque una ley obligue a la castración y se controlen las camadas no deseada. "Una ley super estricta con los criaderos, con las fincas y cazadores".

José Luis confiesa que es conocedor de la saturación en las protectoras y por eso busca, con una caravana, donaciones de pienso por toda España. "Estamos en una situación de emergencia y la sociedad tiene que ser consciente del papel de las protectoras", y es que sin ellas, se quedarían en la calle los más de 400.000 animales que tienen acogidos.