La niña británica Madeleine McCann desapareció en el sur de Portugal hace más de once años, abriendo uno de los casos más mediáticos, marcado por el suspense y la incógnita de la desaparición de la pequeña y de la ausencia de culpables.

Tras once años de búsqueda y cuando está más cerca la fecha en la que la búsqueda de Madeleine podría acabar, el principal investigador del caso David Edgar, ha concedido una entrevista al diario 'The Sun' en la que afirma que "aún está viva y permanece en Portugal".

Edgar, uno de los detectives más experimentados de Scotland Yard y una de las personas que más sabe sobre el caso, asegura que "el caso es desconcertante pero solucionable" y augura que "sólo conseguirán resolver el caso si los testigos deciden confesar": "Ya sea por remordimientos de conciencia o porque se encuentren en el lecho de muerte".

El detective asegura que "también puede darse la situación de que el secuestrador discuta con alguno de los testigos y estos se decidan a confesar". Las palabras del policía corroborarían la versión que los padres siempre han llevado por bandera, que la niña sigue viva en algún lugar del país.