Aitor, el presunto homicida de Janet Jumillas, se ha negado a declarar ante el juez de Cornellà (Barcelona) que investiga la desaparición de la mujer, aunque le ha dirigido unas palabras para desvincularse del crimen: "Era mi amiga, yo no le quería ningún mal".
Según fuentes jurídicas, el detenido, al que el juez ha enviado a prisión preventiva, se ha acogido a su derecho a no prestar declaración, aconsejado por su defensa, en un caso que está bajo secreto de sumario y en el que, por el momento, no se ha encontrado el cadáver de la desaparecida.
Pese a su negativa a responder al interrogatorio del juez y a la Fiscalía, el acusado del homicidio de Janet Jumillas ha aprovechado el turno de palabra que el juez le ha concedido al término de la comparecencia de prisión para desmarcarse de la desaparición e insistir en su relación de amistad con la víctima.
Tras su comparecencia, el juez instructor, que ha prorrogado el secreto de sumario, ha decretado prisión sin fianza para Aitor, una resolución que su abogado, Lluís Costa, ya ha anunciado que tiene la intención de recurrir.
Antes de Aitor, ha comparecido ante el juez el otro detenido, un joven de 23 años vecino de El Prat de Llobregat (Barcelona) al que la policía sitúa como encubridor del crimen y que ha quedado en libertad tras prestar declaración.
El detenido se ha desmarcado ante el juez de la muerte de Jumillas y ha dicho que no sabía nada ni del tipo de relación que mantenía la mujer con el presunto homicida ni de su desaparición, en una declaración en la que ha evitado cualquier elemento que incriminara al otro acusado, han añadido las mismas fuentes.
El juez ha decretado el ingreso en prisión de Aitor, acusado de un delito de homicidio con ocultación de cadáver, a raíz de los indicios recabados en la intervención de los teléfonos de los sospechosos, el examen policial de sus cuentas de correo y de redes sociales y su geolocalización.
Jumillas, vecina de Viladecans (Barcelona), se desplazó el miércoles 13 de marzo a Cornellà para hacer unas gestiones en la delegación de Hacienda y después ya no se supo más de ella. Los Mossos localizaron su coche el lunes 18 de marzo, aparcado correctamente en la vía pública en los alrededores de la sede de Hacienda en Cornellà, aunque no se apreciaba ningún signo de criminalidad.
El vehículo estaba a poca distancia del domicilio de Aitor en Cornellà, que los Mossos registraron durante horas, incluso removiendo la tierra de las macetas que había en un patio, hasta que finalmente hallaron indicios biológicos de que la mujer estaba muerta.
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